Martes, 28 de mayo
Buenos días.
Hoy en nuestra oración de familia decimos a cada una de nuestras madres.
“RECUERDO…”
_ Que no sabías conducir un coche, y aprendiste para llevarme al colegio.
_ Que el dentista siempre me premiaba con libros de cuentos que le habías dado a su ayudante.
_ Que tu presupuesto siempre se estiraba un poquito más, si yo deseaba más que nada en el mundo aquellos zapatos nuevos.
_ Que "solo por esa vez" ordenabas una y otra vez mi desordenado dormitorio adolescente.
PERO NO RECUERDO…
_ … Un solo momento en que no contara con tu apoyo. No con tu aprobación, porque hemos discrepado muchas veces.
_ … Haber estado nunca solo; siempre esperabas para amortiguar mi caída y celebrar mi éxito.
_ … Que estuvieras demasiado ocupada para escucharme, ni demasiado cansada para ayudarme, o demasiado preocupada con tus problemas para no comprender los míos, o demasiado seria para reírte conmigo.
Gracias, Padre Dios, por cada una de nuestras madres.