26 de enero
Hoy, Señor, en nuestra oración de familia te decimos:
Te sentimos cerca cuando otras personas se preocupan de nosotros
y nos ayudan a educarnos,
cuando compartimos nuestra alegría y nos divertimos con los amigos,
cuando alguien nos pide ayuda y nosotros se la damos con gusto.
Te sentimos cerca al regresar a casa y comer en familia, en el rato de estudio y en el descanso, cuando anochece y el sueño nos vence.
Te sentimos cerca, Señor: que te descubramos en lo nuestro en eso que hacemos cada día estamos seguros de que “tú estas cerca, Señor.
Gracias por estar a nuestro lado, en lo bueno y en lo malo, porque estás junto a nuestra familia, gracias Señor.